La federación de Hong Kong apunta a clasificar a la Copa Mundial 2034 y para hacerlo ya prepara un nuevo plan a cinco años. La sombra de la todopoderosa China y el fútbol como instrumento político.
Es de publico conocimiento el estado de ebullición que se vive actualmente en la ciudad/estado de Hong Kong. Desde que la región dejó de ser una colonia británica en 1997 hasta nuestros días el gobierno central chino ha acrecentado de manera exponencial su influencia en los asuntos del enclave y la tensión ha ido escalando año a año. Es por eso que todos los hongkoneses tienen marcado en sus calendario el 1 de julio de 2047, fecha en la que vence la clausula «un país/dos modelos» y la metrópoli pasará a ser controlada en su totalidad por el gigante asiático.
Las revueltas que ocurren periódicamente son un intento desesperado de los locales para seguir manteniendo cierto grado de autonomía pero todo indica que tarde o temprano China recuperará el control de la región. Debido a esto la arena deportiva (y particularmente los partidos de fútbol) se han transformado en el lugar perfecto para que el pueblo hongkones puede hacer valer su autordeterminación.
Desde siempre el football ha sido la disciplina mas importante en Hong Kong. Si bien los partidos de la liga tienen una concurrencia no tan elevada cuando juega la selección nacional la historia es distinta. Esto se debe a que cada encuentro internacional es una oportunidad de hacer visible la problemática en torno a la autonomía del territorio. Ya sea por eliminatorias o en un amistoso la sociedad de HK aprovecha la chance y difunde sus reclamo cada vez que rueda el balón.
El «Proyecto Fenix»
Como ya hemos contado en nuestro blog China ha comenzado una revolución que busca culminar con la selección jugando (y organizando) una Copa del Mundo. Sin tanta publicidad – ni tantos recursos – la federación hongkonesa también emprendió un proceso similar hace tiempo atrás al que denominó «Proyecto Fenix». Esta reestructuración de todo su fútbol que comenzó en 2011 buscó potenciar jugadores y entrenadores locales para levantar el perfil competitivo del equipo nacional.
Para eso contrató entre otros al ex-jugador y entrenador australiano Steve O’Connor. Desde 1990 hasta el 2008 O’Connor trabajó activamente dentro del CoE o Center Of Excellence, el departamento de fútbol del Australian Institute of Sports (AIS). Allí participó en la formación de algunos de los mejores futbolistas aussies de los 90’s como Mark Viduka, Brett Emerton o Harry Kewell. Ademas la Hong Kong FA proyectó y comenzó a construir el Jockey Club HKFA Football Training Centre, un centro de alto rendimiento único en la región.
Otro de los puntos fuertes de este plan impulsado por la fue la profesionalización de la liga local a partir de 2013, que pasó a denominarse Premier League. La intención era atraer a jugadores extranjeros de cierto renombre y así permitir que el talento local tenga un mayor rose. Ademas, y no es un dato menor, la mayor afluencia de extranjeros permitió la posibilidad de sumar futbolistas nacionalizados que incrementen el talento de la selección. Cualquier similitud con lo implementado por China no es casualidad.
Si bien este ambicioso proyecto cumplió su primer gran objetivo que fue levantar los estándares del fútbol local la Hong Kong Football Association ya está pensando en la siguiente etapa: entrar en la Copa del Mundo. Y en lo posible hacerlo antes de que lo haga China. Para los hongkoneses es imposible no compararse con sus incómodos vecinos y por tanto la competencia – aunque desigual – siempre está a la orden del día. El presidente de la asociación Pui Kwan-kay aseguró en los últimos días que este nuevo plan quinquenal sentará las bases para lograr el objetivo de estar en el certamen mas importante a nivel selecciones:
No estoy diciendo que lo logremos en los próximos cinco años. La Copa Mundial es un sueño para muchos equipos y nosotros necesitamos aspirar a esos sueños también… Sin lugar a dudas tendremos que poner mucho esfuerzo en esto y necesitaremos reclutar a la gente indicada. Los jóvenes futbolistas que hoy tienen entre 10 y 12 años serán la clave.
Actualmente el plan Fenix – que finaliza el próximo marzo – tiene un financiamiento anual de 50 millones de dolares hongkoneses (6,5 millones de dólares americanos) pero se espera que en esta nueva etapa la FA pueda disponer de una caja mayor. Los fundamentos principales de este proyecto aun no han sido presentados al público pero se puede inferir que el mayor énfasis estará puesto en las selecciones juveniles. Si el proceso obtiene los resultados deseados – y teniendo en cuenta que a partir del 2026 la Copa del Mundo tendrá 48 participantes – es posible que para el 2034 Hong Kong pueda asistir a la máxima cita del fútbol internacional. Resta saber si podrá hacerlo antes que el gigante Chino.
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